miércoles, 26 de septiembre de 2012


 
Relato de uno de los 20 jóvenes entrevistados

Desde chiquito, como a los ocho años, empecé a agarrar malos pasos, a coger la calle y a robarme cosas. Me pusieron en un colegio pero permanecía más afuera que adentro; casi no estudiaba y me maltrataban, hasta cuando me fui del todo para la calle, con nueve amigos. Con ellos empecé a chupar gasolina y después bóxer. Tenía nueve años y era el más pequeño de todos. Robábamos, aunque yo casi no participé en eso. Dormíamos en la calle, en cajas de cartón grandes; ahí nos metíamos y pasábamos la noche como si estuviéramos en una cama. Acompañaba a los amigos para dondequiera que iban, y me ganaba para la comida, por ejemplo, cargándoles las maletas a los pasajeros de los buses que llegaban. Después me iba casi todo el día a bañarme en una represa; si tenía plata comía pan y gaseosa, y si no, pues no. No volví donde la familia porque cada vez que llegaba me daban severa muenda. Me pegaban con cables o con lo que encontraran por delante…

El testimonio de este joven desmovilizado, me deja reflexionando, acerca de como, las relaciones familiares pueden influir en la vida personal de los individuos. En el caso de este joven, el descuido de sus padres, los insultos y el maltrato que recibía,  lo llevo a buscar un nueva vida terminando en las filas de un grupo guerrillero.
 

  SITUACIÓN  ACTUAL  DE COLOMBIA

 


Nuestro país actualmente atraviesa por diferentes conflictos tanto sociales como políticos y económicos. la violación de los derechos humano, la concentración del poder en la minoría y el abandono por parte del estado a la población, traen consigo, problemas como la falta de educación el desplazamiento forzado de los campesinos hacia las zonas urbanas, la pobreza y las desigualdades sociales.
Me  indigna que   la clase  dirigente  y los pequeños  grupos  de  elites digan  que  hay  un  notable mejoramiento en Colombia  y  que es  un país  sin  problemas  tranquilo  y seguro,  cuando  bien sabemos  que la  gran  mayoría  de  colombianos  están  sumidos a  la  exclusión, humillación abandono  y  a el ostracismo.